José Manuel Inchausti Pérez
CEO del Área Territorial IBERIA y vicepresidente de MAPFRE
Digitalización y responsabilidad, nuestras respuestas ante el covid-19
La lucha contra esta pandemia es el mayor reto al que nos hemos tenido que enfrentar como sociedad en mucho tiempo, un reto que exige respuestas de todos. Y la primera exigencia es claramente en torno a la salud. Es la prioridad absoluta a la que tenemos que contribuir todos, en mayor medida los profesionales sanitarios, que están siendo los grandes héroes en esta crisis, pero también los demás en lo que nos corresponde: quedándonos en casa, asegurándonos de cumplir las medidas de protección si tenemos que salir a la calle y, como empresas, dando todas las facilidades para que nuestros empleados puedan protegerse. Por eso, en MAPFRE España hemos fomentado el teletrabajo desde el primer momento, y en la actualidad tenemos a más de 20.000 personas conectadas desde sus domicilios en España, entre empleados, delegados comerciales y agentes. Sin duda, toda la inversión y esfuerzos realizados en digitalización en los años precedentes nos han ayudado ahora para ser capaces de dar una respuesta ágil y rápida en estos momentos. Además, hemos dado flexibilidad horaria total a nuestros empleados para que puedan compatibilizar su vida laboral y personal sin dificultades en estas situaciones tan extraordinarias, y hemos dado apoyo psicológico y en materia de salud todos los que lo han necesitado.
Pero las empresas hemos tenido que afrontar además el reto que supone seguir dando al cliente la atención que necesita y espera de nosotros, a la vez que protegemos su salud y la de nuestros empleados y colaboradores en estas excepcionales circunstancias. Así lo ha hecho MAPFRE, que ha seguido prestando su servicio con la máxima calidad posible. Para ello, hemos reforzado los canales no presenciales de atención al cliente, hemos mantenido un número suficiente de oficinas abiertas, a las que hemos dotado de todas las medidas posibles para proteger a nuestros empleados y mediadores (desinfección, equipos de protección, formación en cómo prevenir el contagio y la propagación del virus…) y hemos utilizado herramientas como videoperitaciones para continuar prestando servicio y minimizando los riesgos. Nuevamente tengo que referirme a los grandes esfuerzos realizados durante los últimos años para convertirnos en una compañía omnicanal, mejorar la experiencia digital de nuestros clientes y digitalizar nuestra red comercial, que ahora nos han ayudado extraordinariamente a afrontar este reto.
La salud es la prioridad absoluta a la que tenemos que contribuir todos, en mayor medida los profesionales sanitarios, que están siendo los grandes héroes en esta crisis, pero también los demás en lo que nos corresponde: quedándonos en casa, asegurándonos de cumplir las medidas de protección si tenemos que salir a la calle y, como empresas, dando todas las facilidades para que nuestros empleados puedan protegerse.
Además, las empresas responsables tenemos la obligación de impactar positivamente en nuestro entorno, especialmente en momentos como éste. Por ello desde MAPFRE hemos contribuido a aliviar la complicada situación económica que atraviesan nuestros clientes PYMES y autónomos, nuestros proveedores y comerciales, con medidas que van desde la devolución de primas del seguro, hasta anticipos de facturación o comisiones. En total, hemos movilizado 140 millones de euros destinados a este conjunto de colectivos.
Y por supuesto, no podíamos olvidarnos del resto de la sociedad. Por eso hemos participado, con 5,7 millones de euros en un fondo sectorial para proteger al personal sanitario y, a través de Fundación MAPFRE, hemos donado 5 millones de euros al CSIC para investigación. En definitiva, nos hemos preocupado de todos nuestros grupos de interés, como creemos que corresponde a una compañía sostenible, cuya razón de ser es la confianza.